lunes, 25 de febrero de 2013

LA PAREJA: algunos mitos y recomendaciones




Influenciados por las películas románticas y por los cuentos de hadas, la mayoría hemos crecido con un mensaje que se quedó grabado en nuestro inconsciente  y que más o menos diría así:

   “El príncipe encontró a la princesa, se enamoraron y fueron felices para siempre”.

    Sin embargo, lo que nos devuelve la realidad no es así: hay príncipes que se convirtieron en ranas, a veces es la princesa la que salva el príncipe, y a veces el fueron felices para siempre se ha transformado en un infierno de tareas y obligaciones con muy poco espacio para el disfrute.

 En todas las relaciones de pareja primero hay una fase de idealización de la pareja, que se producen en el tan conocido “enamoramiento”:  veo a esa persona como alguien mágico y especial, como “mi media naranja”, y se exaltan todas los aspectos que me gustan de esa persona, y se ignoran o hasta hacen gracia aquellos que no me gustan.

Pasado el proceso de enamoramiento, comenzamos a ver con más claridad aquellos que no nos gustan tanto, y es cuando empezamos a ver a nuestra pareja como es en realidad, y cuando también empezamos a mostrarnos como somos en realidad (hasta entonces, se tiene especial cuidado en mostrar aquello que más me gusta de mí mismo para que quiera estar conmigo).
 Si logramos traspasar esta fase, pudiendo aceptar a mi pareja tal y como es, con las cosas que me gustan y con las que no, y pudiendo mostrarme tal y como soy, y dejar que me quieran así, es cuando hablaríamos de pareja consolidada.


Llegados a este punto, hay que tener especial cuidado para encontrar un equilibrio en la pareja, para que la rutina no lleve al aburrimiento,  para que la pareja no se convierta en algo estancando sino en algo que sigue fluyendo:

-         Dedica tiempo para disfrutar de momentos de ocio con tu pareja.
-         No des por sentado que “por tener pareja ya está todo resuelto”. En la pareja tiene que haber una continua “conquista de tu pareja”, y de tu pareja hacia ti.
-         Los detalles, las caricias, las sorpresas… siguen siendo importantes.
-         Comparte con tu pareja nuevos juegos y fantasías que os apetezca disfrutar para mejorar vuestra sexualidad.
-         Habla con tu pareja de lo que te gusta y de lo que no.

miércoles, 20 de febrero de 2013

Crisis: una oportunidad de cambio


La palabra “crisis” proviene de un vocablo griego que significa “ruptura”. Se trataría de una hecho o circunstancia que producen un punto de inflexión, un antes y un después que puede ir hacia la “la destrucción” o resurgir, evolucionando a partir de ella.

En estos tiempos que corren en los que la palabra crisis está por todos los medios, en los que nos encontramos en un período de incertidumbre y de tensión, me gustaría aprovechar para dar algunas ideas que ayuden a sobrellevar mejor esta situación, especialmente para aquellas personas que se han quedado en desempleo o temen poder perder sus puestos.



Si te has quedado sin empleo, quizás es buen momento para replantearte tu vida. Tal vez estabas en un trabajo que no te gustaba, o no soportabas a tu jefe, o te gustaría realizar un cambio pero no te atrevías por la comodidad que te ofrecía tu trabajo (la seguridad de lo conocido).
Claro que puedes quejarte y lamentarte por todas las incomodidades y preocupaciones que te puede producir esta situación, pero sin caer en victimismos que no te van a llevar a nada y sin replegarte al aislamiento.

Cosas que puedes hacer:
-       Disfrutar de un tiempo de descanso. Tampoco es necesario que tras la pérdida de empleo, haya que ponerse sin descanso a buscar un nuevo empleo sin valorar si quiera qué es lo que quiero hacer o coger lo primero que salga si mis condiciones empeorarían.
-       Aprovechar para hacer un curso que te sirva de cara a un futuro empleo.
-       Dedicar más tiempo a aquellas cosas que te gustan pero para las que antes apenas tenías tiempo: leer, pasear, pasar más tiempo con los tuyos, ayudar a tus hijos…
-       Apúntate a alguna actividad que te mantenga activo.
-       Planificarte el tiempo.

Lo importante es no caer en la idea de  “que no valgo” por haber perdido el empleo, y poner manos a la obra para la búsqueda de un nuevo empleo y de nuevos proyectos, recordando siempre que tenemos numerosas capacidades que hemos adquirido a lo largo de los años tanto en lo laboral, como en lo personal, que nos pueden ayudar en esta búsqueda.


viernes, 15 de febrero de 2013

Autosuperación: de lo imposible a lo posible


Todos conocemos a alguna persona, y tal vez nos haya pasado incluso a nosotros mismos, que, aún teniendo en mente numerosos sueños y proyectos no nos atrevemos a ponerlos en marcha.
Algunas cosas que la persona se dice en estas situaciones es: “es muy difícil”, “no va a dar resultado”, “es algo muy bonito pero es sólo un sueño”….  Y le dedica muchas más energías a encontrar mil justificaciones para no hacerlo que para tratar de realizarlo.
En la base hay un sentimiento de no ser capaz y un cuestionamiento de la propia valía. Si no pongo mi proyecto en marcha, si no lo intento, no le dedico esfuerzo…. Siempre puedo salvar mi autoimagen pensando que no salió porque no tuve tiempo, dinero, por las obligaciones…. Pero no porque no pudiera. Intentamos evitar el sentimiento de fracaso que nos provocaría el haberlo intentando y que no hubiera salido. También hay mucha exigencia, de no ser capaz de permitirse ningún error, si no lo intento, tampoco “lo haré mal”.
Pero esto en sí mismo es lanzarnos piedras a nuestro propio tejado. Hay muchas personas con muchísimas cualidades, y con mucha vocación, que por el miedo a fracasar no se arriesgan siquiera a tratar de poner en marcha algo que sin duda les llenaría de satisfacción. 


Claro que cuando uno empieza algo surgen muchos sentimientos: la inexperiencia, el no saber, el miedo a que salga mal…. Pero la gran mayoría de las veces, con una adecuada preparación, organización y trabajo es más que probable que puedas conseguir alcanzar objetivos que son importantes para ti. Siempre puedes buscar apoyos y gente que te pueda orientar y ayudar a llevarlos a cabo, tampoco hace falta hacerlo todo solo. Y en cualquier caso, siempre contarás con la satisfacción de no quedarte con la incertidumbre de “¿Cómo sería mi vida si hubiera hecho….?”, y de haberte lanzado, no desde un impulso sino desde algo reflexionado y con cabeza, a hacer aquellas cosas que te gustaría hacer.
Puede que algunas no salgan, pero sin duda, habrá otras que sí puedas conseguir. Por lo que, si estás insatisfecho que algunos ámbitos de tu vida, párate un momento a reflexionar qué es lo que te gustaría cambiar, identifica tus objetivos, y…. ¡ponte a ello!

sábado, 9 de febrero de 2013

RAÍCES


Sabemos que un árbol sin raíces se muere. Para poder crecer firme y sano, necesita estar bien enraizado en el suelo, tener un tronco que le sostenga y una hojas para estar en contacto con la luz, con el agua, con el aire….Cuanto más fuertes sean sus raíces, más difícil será derrumbarlo.

Al igual que el árbol, es importante para nosotros el tener unas buenas raíces. Esto significa poder tener la seguridad de estar bien apoyado sobre mis pies, que mi postura diga quién soy yo y  de dónde vengo, desde la dignidad y el derecho que tengo como ser humano, simplemente por ser quien soy.




En esta cultura, donde prima lo inmediato y donde se nos ha bombardeado desde una sociedad de consumo que lo que nos va a hacer felices es el tener más y mejor, y cuánto más mejor, va surgiendo en las personas un profundo sentimiento de vacío que tratamos de llenar comprando un coche, un mejor móvil…. Y sin embargo nos sigue dejando un sentimiento de insatisfacción.

Estamos dejando de lado la importancia de la familia, de los valores personales…. Poder conocer la historia de mis padres, de mis abuelos…. Las circunstancias en las que vivieron, las dificultades a las que se tuvieron que enfrentar y cómo lograron superarlas, nos va a dar numerosas herramientas y la sensación interna de que realmente YO PUEDO, que provengo de esta familia, y que aún en circunstancias muy difíciles se puede salir adelante.

Es cierto que en todas las familias hay heridas, en todas las relaciones humanas las hay, pero se trata de poder ver estar heridas desde el respeto y desde el amor, que lo que consideramos errores es porque no pudieron hacerlo de otra forma y lo hicieron lo mejor que supieron, con lo que ellos habían aprendido.
Podemos aprender de estos errores para no repetirlos, y recoger los valores que nos han transmitido para elegir aquellos que sí queremos transmitir nosotros, y descartar aquellos que no.


Esta es la razón por la que siempre que miramos a una tribu, tenemos la sensación de unidad y de fortaleza que hay entre ellos, es el vínculo, y es porque ellos sí tienen claro la importancia de transmitir de dónde venimos y de tener nuestras RAICES.